lunes, 20 de noviembre de 2017

Dias finales




En Thamel, Kathmandu, salgo de una clase de yoga donde las posiciones, la respiración y la tensión de los músculos hacen olvidar el pasado, el presente y el futuro. Si es que este tambien se puede olvidar.

La mente vuela y la situación de tranquilidad y ligereza es mayor. Ayer he recibido una mala noticia de un compañero, me afecta. Espero que salga adelante con todo.

Escribo desde el jardín de los sueños, donde los jardineros minuciosamente avanzan con los detalles del césped y el cuidado de las flores. Me gustan los frutales que hay con grandes toronjas o pomelos amarillos colgando como balones, los magnolios y los pájaros a sus anchas. Un oásis en la ciudad. La sensación es de calma chicha...

Abrazo,

Temazo que me recuerda el compadre Guille desde San Fernando... y quien quiera que vea el doc de la historia de la canción. Insurrección: La mitad invisible de una obra de arte



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